
En caso de que su toldo no disponga de un sistema de recogida automatizado, deberá recoger el modelo en caso de lluvia, rachas fuertes de viento y otros fenómenos atmosféricos agresivos. Verifique siempre que ningún obstáculo dificulte los movimientos de apertura o decierre, y lleve a cabo revisiones periódica.
Además, aquí le dejamos una serie de consejos adicionales para optimizar el rendimiento de su sistema de protección solar a través de un correcto mantenimiento del mismo:
– Eliminar regularmente el polvo y la suciedad acumulados en la lona y el herraje, preferiblemente mediante aspiración.
– Evitar aplicar un chorro de agua a presión sobre la lona.
– Cuando se requiera, limpiar la lona y el herraje con una solución de agua y jabón neutro. Aclarar con agua abundante.
– No utilizar nunca disolventes ni detergentes abrasivos. Dañarán el tratamiento previo que reciben los tejidos desde fábrica.
– Dejar tiempo para que el toldo se seque completamente antes de recogerlo.
– Es recomendable desmontar el faldón en los meses de no utilización del toldo para evitar su deterioro.